jueves, noviembre 09, 2017

Oda a los guachis


Siempre mirando, ahi estaban petrificados
con uniformes rancios 
y escopetas viejas que nunca habían funcionado
y hambre
un hambre del diablo
con cara de miedo y sueño
y eterno cansancio
protegiendo propiedades y ambiciones de otros
que no tenían tiempo 
y mucho menos cojones.
Quien sabe?
Quien sabe?
Pero ellos ahí estaban
tenían que estarlo
afuera, 
lloviendo y con el sol picando,
de noche y de día
a la hora de todos los cumpleaños
todos los días, sentados o parados
cayéndose de lado
viendo el tiempo arrastrarse por los bordes grises de las rueditas chillonas
de las mochilas
de los niños ricos que pueden ir a la escuela.
Con una radio pequeñita pegada de las orejas
que vociferaba bachatas y noticias 
catastróficas 
de los robos impúdicos de telenovela 
de todos los políticos
y los anuncios de Coca-Cola, y de Tesaka 
la resaca, y de La Pela, ni se diga, ese si lo repetían… y del super salón miguelina,
la que te convierte el pelo malo en santo,
la que te vuelve una mujer fina…
Y entonces se acordaban de sus mujeres y las llamaban con una recarga de 25; los mismos 25 pesos que la doña de la 2da planta le había tirado por la ventana, por subirle la compra. 
A veces las mujeres no respondían las llamadas y las maldecían 
celosos pedían una chatica
de ron blanco 
para olvidar todo
para que llegará otro día
y así en la madrugada susurraban una balada despacio,
mirando, mirando, esperando que pasará algo 
se quedaban dormidos por ratos, hasta que una bocina 
o la luz de alguno de los carros
que había llegado, 
le abría a fuerza
los ojos.



Foto de:  http://serie87.blogspot.com/2010/07/el-guachiman-dominicano.html

domingo, octubre 22, 2017

ah

Estas tirado en la arena.
Es una playa cualquiera.

Estas solo y no piensas 
en nada. 
o eso piensas…

te sientes relajado, te sientes que vuelas
con los brazos abiertos
con los ojos cerrados
con las manos abiertas
con la boca cerrada
con el corazón abierto
con la mente alerta, 

muy, muy despierta…

las palmeras susurran historias
pero no quisieras hacerle caso
hablan de muertos, oro, poder, y muchos esclavos.
no, no quieres…
definitivamente
vas a ignorarlo.
  • ok, vamos a intentarlo. 
dice tu ángel o tu diablo…

quien sabe?

domingo, febrero 26, 2017

Cuando despierta mi consciencia

Respiro despacio. Mis manos 
se tocan lento con margaritas del campo 
y el viento
se cuela entre las hojas y las ramas de los arboles.

Bailo 
y la tierra tiembla
mi cuerpo y mi espíritu se mezclan
se caen
se levantan
se quiebran
y me doy cuenta 
sin querer que soy totalmente frágil
que no hay seguridades
ni relaciones estables,
que fue todo un cuento que nos hicieron para que durmiéramos
tranquilos
por un tiempo.
Pero al tiempo
no le importa nada.

Lloriqueo.

Y no entiendo
y  no se por que estoy haciendo esto
porque corro como si un demonio me estuviera persiguiendo.
El camino esta oscuro y nunca sale el sol 
¿será por eso?
me victimizo un poco para justificar los problemas de lo que me estoy metiendo
en el cerebro
mientras una mano familiar me alcanza el estimulante flagelo,
luego
subo feliz por la escalera imaginaria de todos mis usuales convencimientos
que no son mas que estúpidos miedos y mitos y mitos
y miedos y mitos y miedos y mas miedos
todo porque no tengo respuestas y no se quien soy y no tengo 
ni una sola idea clara de para qué
o por qué estoy aquí 
entre ustedes
existiendo,
respirando,  moviendo 
fichas como un juego
no se 
sigo corriendo, 
me sigo moviendo,
me sigo riendo, 
y en cualquier momento 
se que todo va a explotar,
siendo de todas manera un hecho totalmente insignificante,
seré un cero a la izquierda.
Seré gusanos pequeños y escurridizos entre la tierra,
y me pudriré y me transformaré
y volveré a la matriz 
y volveré a la mierda 
volveré a su inexplicable bola de energía atómica
a su inexplorable esencia. 
Me transformaré en otro muñeco
y daré vueltas 
y sonaré como un eco 
y aprenderé y olvidare e intentaré todo 
sin salida,
aquí no hay puertas...
¿Qué es exactamente esto?
Estoy viviendo?
Estoy viviendo!
Y estoy muriendo! 
Estoy muriendo!
y son las dos caras de la  misma moneda…

Supervivencia.



Mural (Narbön) y lamparas en caoba y resina pigmentada, 
por Layra Giovanna y Gabriel Lopez. - 2009